28/2/07

NOV ARTIS

 



 

 

 

Considerando

Los cuarenta y cuatro años y cinco meses
más los catorce días
y algunos otros minutos
y hasta instantes
que llevo experimentando
e incluso investigando
para ponerme a escribir
cada uno de los versos
de este poema


Cuando lo termine
podré imputar
con una sencilla regla de tres
a cada verso
su coste irrecuperable
antes de patentarlo
y disfrutar de la justa compensación
por haberte decepcionado sin necesidad
de haber compartido con ninguna mosca

La dulce leche
que me regaló mi madre.


676 días por verso y algunos minutos y hasta instantes

 

 

 

La ciudad del resentimiento social


En verano cuando hace calor, me gusta sentarme bajo un árbol, al fresco.

Multitudes domingueras se acercan a la playa para el ritual del sol y el agua. Cientos de bicicletas aparcadas frente al paseo marítimo esperan a sus dueños que se enfrentan al día festivo playero.

Decenas de motos mal aparcadas inundan las aceras como una marea viva triunfante.

Símbolos de progreso, movilidad y libertad se mezclan con los arboles cultivados y trasplantados , con farolas, bancos, papeleras, coches, setos...


El mar huele a madera recién cortada

Agosto paso como un suspiro

Tenderos y porteras bostezando...


1 comentario:

Pasodezebras dijo...

Intensa locura cairota
Hola, pulga asaltante
¿Where are you from?
Soy de Beirut y de Estambul
Polvo suspendido en el fuego
Del mediodia acre
Hey Mr. tambouriman...
Buscamé en el centro de la piramide
de la pureza, de la nada, del olvido